Como ya sabréis, hace ya algunos días que mi vida no corre peligro, pero aunque la situación va mejorando, mi condición sigue siendo bastante seria.
Las principales heridas que me que quedan por curar son consecuencia directa de las quemaduras provocadas por la electrocutación, y los daños por la caída ya están en proceso final de mejora.
Durante los próximos días, me realizarán más intervenciones de cirugía plástica para corregir las áreas del cuerpo que aun están quemadas.
Aun sigo postrado en la cama ni puedo mover las extremidades por mí mismo, por tanto, dependo de lxs enfermerxs y familiares para realizar tareas cotidianas.
Sin embargo, quiero darle las gracias a todxs aquellxs que hasta ahora han estado cerca y me han hecho sentir su presencia y solidaridad.
Ahora pido a todxs un poco de paciencia (el primero que debe tenerla soy yo), para poder daros un abrazo y saludaros estando en plena forma.
Mando un agradecimiento especial a mis familiares y a mi compañera Emanuela que han tenido que superar momentos difíciles, y por eso os pido a todxs que no la presionéis, dado que se está encargando de muchos asuntos en esta historia.
Me encargaré de contactaros personalmente en el momento en que las cosas mejoren para poder conoceros y abrazaros con más calma.
Justo en estos momentos, estoy sometido a las severas disposiciones del “departamento especial” del CTO (Centro Traumátologico Ortopédico) de Turín y, por tanto, con fuertes restricciones en las visitas, reservadas a la familia y amigxs cercanxs.
Pido que este escrito circule por todas los espacios que han seguido el progreso de este asunto, aunque espero que no se convierta en objeto de especulación periodística. Estoy muy contento de recibir vuestras noticias y contactos, pero no garantizo que pueda responder en breve.
La dirección a la que podéis escribir es:
Frazione Cels Ruinas 27 – 10050 Exilles (TO)
Desde la cama de un hospital, 21.03.2012
Fuerza y salud a todxs,
Luca Abbà
Luca Abbà