Alrededor de las 7.00 horas, los piquetes
cortaban la carretera local que discurre paralela al pozo, a la altura
de Blimea, y minutos más tarde las fuerzas de seguridad hacía su
entrada en la zona cargando contra los manifestantes por medio de botes
de gas y pelotas, que fueron respondidos por los mineros mediante el
lanzamiento de voladores.